Cuando queremos comunicarnos en la tierra generalmente lo hacíamos instalando dos antena que se puedan ver una a otra. Pero que pasa si la distancia es larga, por ejemplo una en América y la otra en Europa. Las antenas no se pueden ver porque la tierra es redonda.
La solución para esto, son los satelites artificiales. Un satélite artificial es un objeto enviado desde la tierra y ubicado en una orbita, de tal manera que se desplaza o mueve junto a la tierra.
El satélite trabaja como un repetidor, es decir, una antena que transmite y envía la señal al satélite y este a su vez lo re-transmite a otra antena u otras antenas instaladas apuntando a su dirección. De esta manera podemos conversar por telefono o mirar un programa en vivo de un continente a otro.
El satélite puede comunicar dos sitios que en la tierra no se pueden ver el uno al otro. Un sistema de comunicaciones por satélite tiene 2 partes:
El segmento terrestre: Comprende la estación central (que cumple funciones de envío de datos y control de sistema), como es por ejemplo un canal de TV.
El segmento espacial: Se refiere al satélite propiamente dicho y en donde se encuentran los repetidores (conocidos como transpondedores). Cuando cambiamos de canal en nuestro control remoto lo que hacemos es pasar de un transponder a otro hasta encontrar aquel que nos permita ver. Tecnicamente estos transponder varian con regularidad por eso es necesario hacer las actualizaciones después de los cambios y obtener la nueva lista de ubicaciones.
Fuente: viasatelital.com
